alergia a la leche de vaca

¿Tiene tu hijo alergia a las proteínas de la leche de vaca?

Si cuando alimentas a tu pequeño héroe, notas que no termina de tolerar bien la leche, es muy probable que tu pequeño tenga alergia a las proteínas que contiene la leche de vaca (APLV). Esta alergia es la más común en los bebés y aunque no siempre es fácil de diagnosticar, aproximadamente el 2-3% de los niños menores de 1 año la padecen. ¡Os contamos cómo detectarla y poner solución lo antes posible!

leche

¿Cómo notar que tu pequeño tiene APLV?

Tú bebé todavía es muy pequeño y sus intestinos todavía aún no están completamente desarrollados. Por eso, cuando le das el pecho o lo alimentas con biberón, estas proteínas que contiene la leche pueden terminar en su sangre sin ser digeridas.

La lactancia materna exclusiva es el mejor escudo para proteger a tu bebé de padecer una alergia alimentaria, incluida la APLV. ¡Pero dar el pecho no asegura una protección total!

Normalmente, debería ser el sistema inmune de tu pequeño el encargado de limpiar estas proteínas de la leche sin problema. Pero si tu hijo tiene alergia a la leche de vaca, esto no sucederá, causando incomodidades e irritabilidad en tu pequeño. Aunque no es una ciencia cierta, si alguno de los padres sois alérgicos a algún alimento - no necesariamente a la leche de vaca- , y/o asmáticos o tenéis otro hijo con APLV, existe una mayor posibilidad de que tu pequeño desarrolle esta alergia a la leche de vaca.

Independientemente si amamantas o das el biberón a tu bebé, quizás notes ciertos comportamientos en tu hijo durante y tras la toma que te dan pistas sobre estas molestias que le produce la alergia a la leche. Te recomendamos que estés atento a cualquier cambio en el comportamiento de tu pequeño. De esta forma, será más fácil identificarlo … ¡y cortar el problema de raíz!

Bebé con dolor de barriga

¡Alerta! Primeros síntomas

  • Tu pequeño escupe la leche durante la toma, tiene calambres en la tripa o episodios de diarrea.
  • Notas que tu bebé tiene constantemente secreción nasal, la nariz taponada, tos continua o respira con dificultad.
  • Tu hijo tiene cambios de humor sin ningún motivo: está apático, inactivo o hiperactivo, llora mucho y no quiere comer.
  • Puede que a tu bebe le salga algún eccema o un sarpullido rojo y se le hinchen los párpados, la lengua o los labios.

Y tú, ¿qué puedes hacer al respeto?

Como padre, te preocupas de cada cosa que le sucede a tu pequeño y quieres verlo feliz y contento. Por eso, entendemos que no es agradable ver como tu hijo llora o se irrita cuando las molestias que le produce la alergia salen a la luz.

Si sospechas que tu pequeño puede tener alergia a la leche de vaca, en primer lugar consúltalo con su pediatra y cuéntale los síntomas que has ido observando. El tratamiento de la alergia a la leche de vaca consiste  básicamente en ajustar la comida que recibe tu bebé. Para ello, se puede llevar a cabo la prueba de “eliminación y provocación”.  En esta prueba, la leche de vaca se elimina de la dieta de tu pequeño (fase de eliminación) y pasadas unas semanas, su pediatra la agregará nuevamente mediante una prueba.

¿Los síntomas disminuyen durante la fase de eliminación y los síntomas vuelven durante la prueba de provocación? Entonces se puede diagnosticar que tu hijo tiene alergia a la leche de vaca. 

Esperamos que este artículo te haya ayudado para resolver tus dudas sobre este tipo de alergia alimentaria. Sabemos que ser padre no siempre es tarea fácil. Eso sí, cuidando y dándole cariño a tu bebé, ¡iréis descubriendo juntos algo nuevo cada día!