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Cuadro de incentivos para niños: cómo motivarlo cuando se porta bien
Hoy os queremos compartir un cuadro de incentivos para motivar a los niños y niñas, de una forma visual a la vez que positiva, y que les ayudará a conseguir los objetivos que se propongan.
Desde los 2-3 años nuestros peques pueden colaborar en las tareas domésticas más sencillas y adaptadas a su edad. Además, les va a gustar estar implicados en lo que hacen papá y mamá. Nunca es pronto para empezar a enseñarles a participar en las pequeñas cosas y tareas de la casa.
A esta edad podemos proponerles actividades que impliquen clasificar cosas, como encontrar parejas de calcetines, llevar sus juguetes a un cajón o incluso tender o recoger la ropa de un tendedero interior.
Conforme vayan creciendo y con la entrada al cole irán apareciendo otras tareas y rutinas. Ocuparse de su mochila, de su botellita de agua, guardar el almuerzo, dejar su ropa recogida, vestirse y ducharse solitos además de ir instaurando hábitos de higiene y salud como lavarse los dientes después de las comidas, o que a diario coman siempre de forma equilibrada con porciones de frutas y verduras.
Hacia los 4-5 años podrán ir ayudando en la cocina a preparar comidas sencillas, ocuparse de mantener sus cosas ordenadas, su cama hecha, y pronto con el paso a primaria tendrán que encargarse además de sus deberes o encargos del cole
Puedes usar un cuadro de incentivos para niños para imprimir como este, y adaptarlo a la edad de tu peque, para que de una forma muy visual sepan las cosas que tienen que hacer todos los días.
En la tabla pueden ir llevando un control de todas las cosas que hacen bien, usa pegatinas o una marca en los recuadros, si tienes más de un peque puedes poner dos nombres y cada uno usar un color.
Marca metas asequibles, no van a hacerlo todo perfecto a la primera, pero si puedes ponerles un premio si cumplen gran parte de los objetivos, algo que les apetezca, como un día de cine en familia o una excursión con pícnic dónde llevar galletas caseras y sus snacks saludables favoritos. Aunque cuando organicemos algún tipo de actividad en la que incluyamos alimentos que sabemos que le gustan mucho, no se recomienda nunca utilizar la comida como compensación directa. El peque no debe relacionar un buen comportamiento con su plato favorito, porque esto podría llegar a dificultar la hora de la comida.
Cuadro de incentivos para motivarlo cuando se porta bien
Hay que tener siempre presente que un niño portándose “mal” es un niño que necesita ayuda, ya sea para que comprenda una regla, para acompañarle emocionalmente a entender lo que está sintiendo y a manejarlo, o porque necesita atención.
Es normal que tu peque se porte de una forma inquieta, curiosa, movida, tozuda, o que haga trastadas, la educación de un niño o niña requiere tiempo y cariño, pero sobre todo no le pongáis etiquetas, eso no quiere decir que sea inquieto, movido o tozudo, no son niños ni niñas malas o desobedientes, están en un momento de su vida en que necesitan ayuda y guía por parte de las personas adultas que les rodean.
Una de las herramientas que podemos usar, es un cuadro de incentivos.
Enumera las conductas que quieres que mejore tu peque; Puede ser hablar sin gritar, pasar un día entero sin pelearse con su hermano o hermana, hacer caso cuando se le pide que recoja sus juguetes, o usas las palabras “por favor” y “gracias”.
Empieza priorizando con cosas más sencillas, sin esperar tampoco que todo se vaya a cumplir de la noche a la mañana, quizá un primer logro es conseguir la mitad de las veces, y de ahí irse superando semana a semana.
En un cuadro de incentivos no vamos a marcar en rojo o con cruces cuando no consiga algo, simplemente lo dejaremos en blanco, reforzaremos la conducta positiva.
En este enlace tenéis un cuadro de incentivos para niños para imprimir que podéis rellenar y adaptar a vuestras necesidades.