Gordito no es igual a sanote

Bebé gordito no es igual a sanote

El peso y la talla de tu bebé es algo que va a controlar tu pediatra en las revisiones periódicas. Tu bebé irá ganando peso y estatura de forma progresiva, y será en estas revisiones rutinarias dónde podréis ver su evolución.

Escucharás que, en términos de crecimiento, cuando visites a tu pediatra, además de decirte su peso y su medida, te va a hablar de percentiles, y es importante conocerlos y saber cómo interpretarlos.  

Ten siempre en cuenta que el objetivo de tu bebé no es ganar talla y peso de forma exponencial e ir escalando posiciones. Tu bebé estará igual de sano en el percentil 3, o en el 97, siempre que no haya variaciones bruscas en las gráficas de crecimiento. No todos los bebés tienen que ir ganando el mismo peso, ni tener la misma talla. Y es normal que tu bebé gane más o menos peso todos los meses que otros que conozcas. 

El peso de tu bebé no va a ser un indicativo de su salud, si su alimentación es completa y equilibrada. Las restricciones calóricas para reducir el peso no están recomendadas en ningún caso para los bebés de 2 años o menos.  

¿Cómo saber si mi bebé está por encima de la media? 

Si quieres saber si tu bebé está por encima o por debajo de la media, tienes que mirar su percentil, tanto de peso, como de altura.  

Si está en el percentil 50, querrá decir que el 50% de los niños o niñas de su misma edad miden más y el 50% miden menos. Si está en percentil 30, querrá decir que el 30% de los niños o niñas de su edad miden menos que él y el 70% miden más. 

De todos modos, un bebé en percentil 70 no tiene por qué ser un bebé gordito, si su altura también está en el mismo percentil (o incluso mayor). 

Según las tablas de la Organización Mundial de la Salud (OMS), un bebé con una relación peso-talla superior al percentil 98 tiene un peso alto. 

Principales causas y riesgos de la obesidad en bebés 

Si tu bebé tiene un exceso de peso, esto puede influir negativamente en su desarrollo físico y mental, al retrasar el inicio de la marcha o dificultarles el gateo.  

El gateo además de ayudarle a adquirir fuerza en extremidades, cuello y espalda. Desenvuelve el patrón cruzado y fomenta la percepción del propio cuerpo y el sistema propioceptivo.  

Les ayudará a desarrollar la coordinación ojo-mano, habilidad muy necesaria también en el inicio de la alimentación complementaria.  

La importancia de una correcta alimentación 

La mejor base que le puedes dar a tu bebé, para evitar problemas de salud en el futuro, es fomentar buenos hábitos alimenticios.  

Un consumo diario de frutas y verduras, como parte fundamental en todas las comidas, le dará a tu peque una base saludable para el crecimiento y desarrollo en todas las etapas de su vida, además de estar asociado con un menor riesgo de obesidad. 

Algunas de las claves que te ayudarán a desarrollar hábitos de vida saludables son:  

  • La edad de introducción: Empieza a dar frutas y vegetales en los inicios de la alimentación complementaria, alrededor de los seis meses. Retrasar la introducción de alimentos puede llevar a una peor aceptación.  

  • Ofrecer un rango amplio de frutas y vegetales: Prueba frutas de temporada, con diferentes sabores. Incluyendo agrias o amargas. Puedes también mezclar las frutas que menos le gustan a tu bebé con otras que sí acepte muy bien, para aumentar el consumo. 

  • Repite la exposición: No dejes de ofrecerle frutas y verduras, aunque las haya rechazado. Tu bebé puede empezar a probar o incluso gustarle algo que ha rechazado antes más de siete o diez veces. 

  • Enséñale con el ejemplo: Si en la familia y su entorno cercano se consumen frutas y verduras, puede también influir en el cambio de comportamiento y animar al consumo de vegetales. 

Si a tu peque le cuesta comer y tienes la impresión de que no quiere nada de lo que le ofreces, quizá es un picky eater, o un bebé selecto con la comida. Fomenta experiencias positivas relacionadas con los alimentos, establece rutinas y horarios, y deja que tu bebé elija entre varias opciones saludables.