¿Qué pasa si tengo poca leche?

Es muy común dudar de una misma en algún momento de la lactancia y muchas veces los comentarios, la presión social o el falso mito de que pasados unos determinados meses la leche ya no alimenta no ayudan.  

Es también un error creer que el llanto del bebé implica que se queda con hambre o que no producimos bastante leche por notarle inquieto en el pecho. El principal indicador de que nuestro bebé no se está alimentando adecuadamente es cuando el o la pediatra considere que no está ganando el peso adecuado a su edad.  

Tenemos que saber que lo normal es que las madres sean capaces de generar la cantidad de leche necesaria para sus bebés, pero puede haber casos (alrededor de un 3-5% de las madres) que se tenga una baja producción de leche y esto afecte al crecimiento del bebé.  

¿Qué puede causar la hipogalactia? 

Son varios los factores que pueden influir a tener una baja producción de leche, y a veces incluso darse varios. Los más comunes están relacionados con un mal establecimiento de la lactancia:  

• No ofrecer el pecho a demanda ni durante todo el tiempo que el bebé requiera para que pueda estimular correctamente la producción. 
• Inicio tardío de la lactancia tras el parto. 
• Problemas posturales, de agarre, succión o de frenillo.  
• Estrés, fatiga o ansiedad en la madre. 

En estos casos lo mejor es realizar una consulta con una especialista en lactancia materna para que puedan verificar si realmente hay una baja producción y ayudar a revertir la situación.  

Otros factores pueden ser estructurales o anatómicos (como tener poco tejido mamario o haberse realizado una cirugía de reducción), hormonales (SOP, hipotiroidismo, diabetes u obesidad), funcionales (tabaco, alcohol, anemia o desnutrición grave), psicológicos (estrés, preocupación o agotamiento).  

En los casos relacionados con la lactancia, hay algunas cosas que pueden ayudar a mejorar la producción:  

• Favorecer el descanso y el estado de ánimo de la madre.  
• Dejar al bebé tomar pecho a demanda (sin horario y todo el tiempo que quiera) y ofrecer siempre los dos pechos. 
• Evitar dar agua, zumos, infusiones o cualquier alimentación complementaria a bebes menores de 6 meses.  
• Acudir a una asesora de lactancia, IBCLC (International Board Certified Lactation Consultant) o matrona para comprobar el agarre y la postura del bebé al pecho. 

También hay que saber que una baja producción de leche no tiene por qué ser el fin de la lactancia, es posible tener una lactancia mixta satisfactoria durante tanto tiempo como madre y bebé quieran.