Mamá dando pecho

Viajes y lactancia

La lactancia no tiene por qué ser un inconveniente a la hora de viajar. Lo más importante es planificar el viaje de forma que no se alteren las rutinas de sueño y de alimentación del bebé. El objetivo es que la experiencia sea beneficiosa y saludable tanto para el bebé como para la madre. 

¿Los viajes en familia tienen beneficios para el bebé? 

Una de las incertidumbres a las que nos enfrentamos los padres y madres cuando tenemos hijos o hijas, es si es bueno realizar viajes en familia o si es mejor quedarse en casa y mantener las rutinas del día a día. 

Los especialistas en salud están de acuerdo en que es necesario ofrecer a los bebés el mayor número de estímulos posibles, para que el desarrollo social y emocional del recién nacido evolucione satisfactoriamente.  

Sabemos que tu bebé te parece muy pequeño e indefenso, pero su instinto de aprendizaje ya está activo. Por tanto, los viajes le van a aportar vivencias diferentes que le van a ayudar a fortalecer su desarrollo cognitivo y a afianzar el vínculo afectivo con todos los miembros de la familia. 

 

 

Hay que plantearse los viajes como una parte importante del proceso de enseñanza y educación de los hijos. Los beneficios que aportan las salidas familiares son incontestables y pueden realizarse desde el mismo momento en que la madre y el bebé se encuentren en condiciones para emprender esta nueva experiencia. 

Consejos para la lactancia en los viajes 

A día de hoy la lactancia materna está normalizada como un derecho de la madre y del recién nacido. No sólo porque refuerza el vínculo de apego, sino porque el bebé tiene derecho a ser alimentado.  

Viajar por motivos laborales o por vacaciones no solo es posible, sino que se puede realizar de forma cómoda y sencilla. 

Aquí tienes algunos consejos que os ayudaran a superar los miedos de la lactancia durante los viajes: 

  • En los desplazamientos en coche particular, el ritmo del viaje lo marcáis vosotros. Por tanto, vais a poder hacer tantas paradas seguras como deseéis. 
  • Si vais a desplazaros en otros medios de transporte, no os preocupéis por las cosas de vuestro bebé. Todas las compañías permiten acceder con una bolsa de viaje con los productos necesarios de alimentación e higiene. Os recomendamos que llevéis algún juguete, manta o almohada que evoque un olor familiar al bebé y le relaje. 
  • Los trayectos en avión son los que siempre nos causan mayor incertidumbre como madres y padres. Pero es un medio de transporte cómodo y seguro. Ten en cuenta que tu bebé no tiene grandes necesidades, lo más importante para él es tu compañía. 
  • La lactancia materna es siempre beneficiosa para el bebé. Y en los viajes, además, es una gran aliada. En todo momento vas a tener la leche disponible y a la temperatura adecuada. Además, te va a ayudar a hidratar a tu bebé y tiene un efecto relajante ante experiencias que son nuevas para él.  
  • Si no te sientes cómoda ante la idea de dar el pecho fuera de casa, siempre puedes recurrir a la extracción de la leche. Si se obtiene de forma segura y siguiendo pautas higiénicas saludables se puede almacenar a temperatura ambiente durante mínimo 4 horas.  
  • Llevar ropa adecuada para la lactancia o un pañuelo fino y suave, puede ayudarte a sentirte más cómoda a la hora de ofrecer el pecho al bebé y así preservar la intimidad de ambos. 

Lo más importante es que la lactancia se integre con naturalidad en la planificación del viaje y se convierta en un hábito saludable y una experiencia positiva y placentera a largo plazo para la madre y el bebé.