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Esterilizar productos de tu bebé: actualización 2021

¿Cómo y hasta cuándo hacerlo?

Cómo esterilizar chupetes

Desde siempre la forma más común y conocida de esterilizar chupetes ha sido hirviéndolos en un cazo con agua durante 10-15 minutos, dejarlos enfriar, secar y dárselos al bebé.  

La Asociación Española de Pediatría aconseja esterilizar las tetinas y biberones por lo menos los cuatro primeros meses del bebé, ya que, hasta entonces, su sistema inmunológico no puede defenderse de ciertos gérmenes debido a su inmadurez. Si tu peque no ha tomado leche materna, la protección adquirida es incluso menor, sobre todo frente al rotavirus de la diarrea, ya de por sí peligroso. Pero cumplidos esos meses y salvo situaciones concretas, no se deberían seguir esterilizando los biberones y chupetes, o por lo menos no a diario. 

Bastará con que los laves con agua y jabón o, si son aptos, en el lavavajillas a partir de los seis meses. De hecho, hay profesionales de pediatría que mantienen que el exceso de higiene podría estar relacionado con el creciente aumento de las alergias que se producen hoy en día, tanto en la infancia como en edad adulta. 

Existen métodos muy rápidos y prácticos para esterilizar chupetes y biberones, tanto en el microondas como con aparatos eléctricos. Incluso los esterilizadores portátiles que en apenas 3 minutos pueden eliminar hasta el 99% de gérmenes y microorganismos gracias a la luz ultravioleta y sin agentes químicos.  

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Cómo esterilizar biberones

Se aconseja esterilizar los biberones antes del primer uso y también es muy necesario, tener una buena higiene de manos cuando vayamos a manipularlos tanto para recogerlos como para prepararlos, y disponer de un lugar adecuado para su almacenamiento, preferiblemente en un recipiente limpio y cerrado que no deje que entre el polvo y en que será mejor si podemos almacenar todas las piezas desmontadas, por separado. 

El biberón hay que desmontarlo por completo y limpiar todos sus elementos. Voltear la tetina para asegurarse de que hemos quitado todos los restos y fregarlo bien con un cepillo largo por dentro.  

El secado será también algo a cuidar. Las diferentes piezas deberán secarse por separado, ya sea encima de un papel de cocina limpio o en un escurridor adecuado para ello.  

Los esterilizadores eléctricos de biberones nos van a asegurar que todo ese proceso sea correcto, ya que su mayoría nos van a servir también para guardarlos dentro como sistema limpio de almacenamiento. Estos esterilizadores cuentan con capacidades variables, desde modelos individuales a otros en los que limpiar y esterilizar nueve biberones a la vez, con tiempos de limpieza desde tan solo 3 minutos.  

Siguiendo estas recomendaciones podrás asegurar una correcta esterilización de los productos de tu bebé, y evitar así posibles molestias intestinales o diarreas.