Vacunas

Las vacunas

Mantener actualizada la cartilla de vacunación que te entregarán el mismo día que tu bebé, recién nacido, reciba el alta de la maternidad, será su mejor seguro de salud y tu mejor garantía de tranquilidad.

La cobertura vacunal en nuestro país alcanza al 95% de los niños, lo que está permitiendo la erradicación de muchas enfermedades que han amenazado durante siglos la vida de los más pequeños. Y es que la misión fundamental de las vacunas es proporcionar al organismo inmunidad contra una infección antes de que la contraiga. Para ello, se desarrollan a partir de microrganismos (o de la parte no infecciosa de los mismos) que causan una determinada patología, pero alterados de tal manera que no la provoquen.

Una vez administrada la vacuna, el sistema inmunológico responde creando defensas como si hubiera sido atacado por la enfermedad. Así, si una persona ya vacunada se expone a esos mismos microrganismos, los anticuerpos los destruirán evitando que el organismo enferme.

El bebé durante unos meses tiene en su sangre anticuerpos pasivos de algunas enfermedades que le ha pasado la mamá a través de la placenta. No así de otras enfermedades, que al no haber estado nunca en contacto con ellas, lo protegeremos precozmente con la vacunación. Aunque en España la incidencia de enfermedades prevenibles por medio de las vacunas sea de las más bajas del mundo y tengamos pocos casos de polio o sarampión, los gérmenes que las producen siguen presentes y pueden rebrotar, ayudados por la movilidad de la población a consecuencia de la inmigración o los viajes al extranjero, y también por la negación a vacunarse de ciertos grupos de población contrarios a esta forma de prevención de enfermedades.