¿Hemos perdido la chispa? Descubre cómo reavivar tu relación y asume que la rutina no siempre tiene la culpa

04/02/2021 - El tiempo, la rutina, la falta de actividades en conjunto, el desgaste de tener hijos… Muchas son las razones por las que una pareja puede empezar a sentir que se les está acabando la chispa, sin embargo, detrás de esa falta de ‘ganas’ de estar juntos no siempre hay motivos externos. Mirar hacia dentro y aceptar los cambios en las personalidades de los miembros de la pareja ayuda a ‘re-enamorarse’ una y otra vez. Hoy en el Blog de Hero nos ponemos románticos y hablamos sin tapujos de relaciones, chispas y amor. ¿Te quedas con nosotros?

María y Pablo son un matrimonio de cuarenta y tantos que cuidan a sus dos hijos pequeños a diario. Ambos trabajan, desaparecen a primera hora de la mañana y vuelven a verse a última de la tarde con el tiempo justo de dar de cenar a sus peques y llevarlos a dormir. Hace tiempo que se comunican poco, y cuando apagan la luz del dormitorio han comenzado a sentirse extraños el uno del otro. Lejos quedan aquellos años en los que con una sola mirada bastaba para entenderse, o cuando no había jornada laboral que impidiera encontrarse o mandarse mensajes cariñosos. ¿Qué les ha pasado?

El caso de María y de Pablo es un diagnóstico claro de pareja cuyo ritmo de vida les ha hecho caer en la desidia sentimental que genera la confianza extrema en el otro y en que la institución de la familia en sí misma es un muro protector contra desgastes. Nada más lejos de la realidad. Al contrario, casi todas las parejas viven a lo largo de su vida entre 2-4 momentos de ‘desencuentro’ en el que la pérdida de ‘chispa’ a nivel de química personal e incluso sexual pasa factura a todos los niveles.

Sin embargo, en muchas ocasiones ese ‘desenganche’ sentimental del otro no viene dado por factores externos sino más bien internos. Es ahí donde la autocrítica y la aceptación de la realidad, junto con las ganas sinceras de arreglar la situación nos pueden salvar de problemas mayores.

¿Cuándo sé que he perdido la chispa en mi pareja?

Existen situaciones ‘espejo’ que se llaman en las que podemos ver reflejado un problema. No pienses en ti, piensa que una amiga/o se te sienta al lado y te cuenta que vive con su pareja alguna de estas cinco situaciones… ¿Qué pensarías?

No tengo ganas de hablar con mi pareja. La evito. Me aburre y siempre son ‘todo problemas’.
He aceptado ese aumento, no por el dinero, sino por no tener que volver a casa tan pronto.
Hace mucho tiempo que no tenemos intimidad, ni nos miramos a los ojos. Siento que cualquier persona me puede interesar más que mi pareja.
Llega el fin de semana y me agobio. El lunes me alivio.
Sólo me preocupo de mis hijos, a mi marido ni lo veo ni sé cuándo vendrá. Le dejo su espacio, total me da igual.

Si escucharas a tu amigo/familiar decirte esto te asustarías… ¿Verdad? ¿Y no merece la pena que reflexiones un poco si fuera tu caso?

¿Por qué perdemos la chispa?

Parece una tontería, pero no lo es. La psicóloga María del Carmen Camacho Gil nos ayuda a entender y aplicar para la vida de pareja una obviedad mal asumida. Cada uno de los cónyuges tiene que ser feliz. Si perdemos la felicidad individual es imposible conseguir una felicidad colectiva.

Tienes que estar bien contigo mismo/a, serenarte, despojarte de los sentimientos de culpa, ser capaz de recuperar tu independencia emocional y perder el miedo a estar solo/a contigo mismo/a. Tienes que desear estar con él/ella, pero no necesitar estar con él/ella. Tienes que perder el miedo a perderlo/a.

En resumen… antes de echar la culpa a la rutina, a tu pareja, a la falta de tiempo, piensa una cosa… ¿Eres feliz? ¿Qué te impide ser feliz? Si pudieras dibujar una realidad para ti, ¿Cuál sería?

De hecho, existen muchas personas (más de las que nos gustaría aceptar) que no sólo no tratan de evitar la rutina, sino que la fomentan. Llenan sus agendas diarias de actividades absurdas para no estar con sus parejas, echando la culpa a esa actividad frenética que se podría evitar. Piénsalo bien… ¿Es necesario que pases tanto tiempo fuera de casa? ¿No podrías dejar determinadas tareas para otro momento? No culpes al estrés ni a la rutina de algo que quizá estás fomentando tú.

Hábitos de las parejas felices

Digámoslo de otra manera. ¿Qué suelen hacer las personas que gozan de una buena vida sentimental a pesar de vivir en esta sociedad exigente? Es mucho más fácil de lo que puede parecer. Básicamente se pueden resumir en 5 hábitos:

Se comunican de corazón a corazón. Hablar no es decirse ‘Compra el pan’. Hablar es darse los buenos días, decirse ‘Te quiero’ al salir por la puerta, llamarse a mitad de jornada para preguntar qué tal va el día, y cenar sin televisión ni móviles. COMUNICACIÓN.
Se tocan. Besar, acariciar, pellizcar… ¿Se te ha olvidado lo placentero que es? No dejes que tu pareja piense que ya no puede seducirte.
Se sorprenden. ¡Venga, sal de la rutina! ¡Haz algo que no se espere! Llévale el desayuno a la cama (nuestras mermeladas 1886 son ideales para esto ;))
Se apoyan. Cuando tu pareja tenga un mal día, escúchala, apóyala.
Se hacen reír. El humor es el mejor acto de amor por el otro. Si aportas humor y sonrisas en su vida te ganarás su corazón eternamente.

Disfruta de lo bonito que es el amor que se cuida todos los días. Crea tus propios espacios intocables y sagrados para con tu pareja y no te rindas. ¡Para ser feliz también hay que esforzarse un poquito!

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