¡La aparición de los dientes!
¡Tu bebé alcanzará un gran hito cuando sus primeros dientes vean la luz! Los dientes son los huesos humanos más duros y la dentición es un proceso natural del crecimiento de tu pequeño. Aunque en realidad puede no ser tan doloroso como se piensa, es de las primeras molestias que tu hijo sentirá y comenzará a darse cuenta de que todo en la vida, ¡no es tan fácil como parece! Eso sí, los propios bebés se acostumbran a esta situación y se vuelven menos irritables o inquietos con el tiempo a medida que aparecen más dientes. Rápidamente, cualquier preocupación que puedas tener acerca de la dentición desaparecerá ... ¡cuando finalmente puedas ver la bonita sonrisa de tu pequeño repleta de dientes!
Los primeros dientes de leche
No hay una edad específica para la aparición de los primeros dientes. Algunos bebés incluso ya nacen con algún diente, mientras que para otros comienzan a aparecer a los 13 meses de edad. No debes preocuparte si este momento tarda un poco más en llegar: mientras tu pequeño tenga uñas y pelo, los dientes siempre saldrán, ya que comparten el mismo origen de tejido. Por norma general, a los 3 meses de edad los bebés comienzan a explorar con una nueva y emocionante herramienta: su boca. Ésta se convertirá en el principal instrumento con el que tu pequeño explora el mundo.
Los bebés comienzan a producir más saliva de lo habitual y a poner constantemente sus manos (y pies) en la boca. Por eso, es normal que pienses que su primer diente saldrá en cualquier momento; sin embargo, probablemente tendrás que esperar todavía unos meses más.
Una vez que a tu bebé le salga el primer diente, tu pediatra vigilará toda la salud dental de tu pequeño y te ayudará a empezar con un plan de higiene dental para mantener la sonrisa de tu bebé feliz y saludable.
Ver cómo se va completando la sonrisa de tu pequeño es algo realmente especial y bonito. Sin embargo, los nuevos dientes vienen acompañados de una incomodidad e irritabilidad. Es normal, recuerda que la dentición es un proceso natural del crecimiento de tu hijo.
¿Cuáles son algunos síntomas que podría tener mi bebé?
Manejar correctamente la salida de los dientes, no es algo fácil. A veces, culpamos a la dentición de una gran variedad de síntomas que quizás no estén relacionados. En general, los primeros dientes que salen son los dos dientes medios inferiores y la mayoría de los niños tendrán todos sus dientes de leche a los 3 años.
Algunos bebés pasarán por todo el proceso de dentición sin ninguna molestia. Sin embargo, la mayoría de los niños se irritan e inquietan cuando los dientes comienzan a aparecer. Aquí puedes leer algunos cambios que notarás en tu pequeño:
- Ya te habrás dado cuenta de que uno de los pasatiempos favoritos de tu hijo es babear. Además, alrededor de los 6 meses de edad este babeo puede aumentar. Las glándulas salivales de tu bebé habrán madurado completamente en este momento, anticipándose a la introducción de alimentos sólidos en su dieta, cuando comenzará a producir todavía más saliva. Al mismo tiempo, las encías de tu bebé pueden hincharse y estar sensibles, lo que hace que se babee aún más para protegerlas y lubricarlas.
- Es posible que tu bebé quiera mordisquear todo tipo de objetos, tanto los juguetes como sus propias manos y dedos. Por otro lado, tu pequeño podría comenzar a perder interés en los alimentos, especialmente en los sólidos.
- Cuando los dientes de tu bebé empiezan a aparecer puede ser incómodo e incluso doloroso. Es posible que notes que tu pequeño está más irritable o inquieto, lo cual es completamente normal, ¡tú también lo estarías en su situación!
La dentición no causa diarrea o fiebre grave. Pero como tu pequeño puede meterse todo tipo de objetos en la boca durante esta etapa, puede que coja algunos gérmenes por el camino. Algunos bebés tienen un ligero aumento de temperatura el día que les sale un diente y el día anterior. Pero si tu pequeño tiene una fiebre superior a 38° C, debes buscar otras causas. Por otro lado, también es un concepto erróneo muy común que la dentición causa diarrea o heces blandas.
Alivia las molestias de tu bebé
Para que aparezcan los dientes de tus pequeño, primero deben romper las encías, lo que puede ser incómodo o incluso doloroso. Esto puede hacer que tu bebé se vuelva más quisquilloso y menos cooperativo a la hora de comer y a la hora de acostarse. No te preocupes, tenemos algunos consejos para que esta transición sea lo más llevadera posible para toda la familia:
- Después de lavarte las manos, puedes masajear suavemente las encías de tu bebé durante unos minutos … ¡eso seguro que le aliviará! También puedes usar un cepillo de dientes suave, para cepillar los dientes que ya han salido y masajear las encías en los lugares donde están a punto de salir los nuevos.
- Enfriar las encías inflamadas puede ayudar a aliviar el malestar. Los remedios domésticos más comunes que se utilizan son el hielo o un paño húmedo frío.
- Los alimentos fríos también pueden ser una excelente forma de aliviar el dolor: puedes probar con una alimentación a base de leche a una temperatura más baja de lo habitual o, si tu bebé ya está aceptando alimentos sólidos, con frutas o verduras frías. Los alimentos sólidos pueden darse en forma de puré frío y suave, para minimizar el contacto con las encías sensibles. Pero es posible que tu pequeño también prefiera masticar alimentos duros y fríos, para proporcionar una agradable contrapresión a la salida de un diente y masajear las encías. Cada bebé es único y es posible que tengas que intentar averiguar qué es lo que mejor funciona con tu hijo.
- Los mordedores disponibles en el mercado, como los anillos de dentición, pueden ser muy buenos para calmar las encías inflamadas. También puedes enfriar estos objetos, pero siempre en la nevera y no en el congelador, ya que los objetos congelados pueden dañar la boca y las encías de tu pequeño.
- Es posible que tu bebé rechace los mordedores y prefiera poner su atención en los objetos que tiene alrededor. Por eso, es importante que tengas cuidado con el tipo de objetos que tu pequeño tiene a su alcance. Asegúrate de que estos objetos son resistentes y que no pueden desprenderse de ellos pequeñas partículas o pintura.
- El amor incondicional y los mimos son siempre una gran manera de calmar a tu bebé.
- Si la incomodidad de tu bebé parece ser bastante notable, puedes administrarle un analgésico como el paracetamol, siempre siguiendo la dosis correspondiente al peso de tu pequeño y consultando a tu pediatra previamente.
- Por último, los geles de dentición disponibles en el mercado no suelen ser recomendables, ya que no se adhieren a las encías, sino que se enjuagan o se tragan fácilmente, por lo que se consideran ineficaces o incluso peligrosos.
Nuestra misión
En Hero hacemos un esfuerzo extra para preservar la bondad de la naturaleza, apoyando a los padres a criar niños felices y saludables. Hay muchas maneras de hacer comida. Hemos elegido la más difícil pero la más justa: conservar el atractivo natural de los sabores, colores y texturas. Con menos ingredientes y cocinando a fuego lento, como tú lo harías en casa. No es fácil. Es una lucha diaria para ganar pequeñas batallas cotidianas. Creemos en la bondad de la naturaleza y que los alimentos naturales y nutritivos dan a los niños todo lo que necesitan para un comienzo sano y equilibrado en la vida.