La importancia del calcio en los niños

Es muy importante una correcta ingesta de calcio en todas las edades, pero el correcto consumo de calcio en los niños es un aspecto clave en su infancia, época en la que se desarrollan los huesos, en la que tomar el suficiente calcio hará que nuestros peques tengan unos huesos resistentes y obtengan una protección a largo plazo que les ayudará a luchar contra la pérdida ósea que ocurre en etapas posteriores de la vida.  

La masa ósea aumenta a lo largo de la infancia para tener su pico de máxima mineralización antes del final de la segunda década de vida, y es en esa etapa en la que ocurre el estirón de la pubertad cuándo la adquisición de un nivel de masa ósea adecuada va a disminuir de forma sustancial el riesgo de osteoporosis en la edad adulta.  

Unos buenos hábitos alimenticios desde la infancia, incorporando la leche y los yogures a desayunos y meriendas, nos ayudará a sentar las bases de una alimentación equilibrada a lo largo de todas las etapas de crecimiento de nuestros peques. 

Fuentes de calcio

La mejor fuente de calcio es la leche, el yogur y quesos duros como el cheddar, pero hay otros alimentos ricos en calcio como: 

• El brócoli 

• La col rizada 

• Las almendras (no recomendadas para bebés) 

• Las semillas de sésamo (no recomendadas para bebés) 

• Las nueces (no recomendadas para bebés) 

• Los dátiles 

• Las alubias blancas o rojas 

• Los garbanzos 

• Las naranjas 

• Los higos 

• Las ciruelas pasas 

Adicionalmente, los siguientes alimentos son fuentes de calcio, pero su consumo no está indicado para las etapas iniciales de la vida: 

• Las berzas 

• Las espinacas (no recomendadas para bebés) 

• La soja verde fresca (habas de soja) 

Hay que tener en cuenta que la biodisponibilidad, la forma en la que nuestro cuerpo asimila el calcio, es mucho mejor en los productos de origen animal y debemos saber también que tanto el yogur como el queso tienen un nivel de lactosa más bajo que la leche. La lactosa ayuda a la absorción del calcio en los huesos. 

En peques que tomen bebidas vegetales en vez de leche habrá que suplementar siempre esa ingesta de calcio con otros alimentos.  

Hay productos lácteos de consumo infantil ya preparados sin lactosa. Será el o la especialista, pediatra o nutricionista quien determinará y ayudará a que la dieta de los peques con alergias o intolerancias a la leche de vaca o la lactosa sea equilibrada y tenga los aportes necesarios de calcio y vitaminas. 

Calcio y vitamina D 

No solo es importante tomar calcio, también tomar vitamina D, ya que esta contribuye a su correcta absorción y fijación.  

La vitamina D es una vitamina que sintetizamos en la piel gracias a la exposición solar (obtenemos el 90% de esta vitaina de la exposición solar y un 10% de los alimentos), pero con la importancia de proteger a los peques del sol y el uso de cremas protectoras puede ser importante suplementar a los peques con esta vitamina. Consultad siempre con su profesional de la salud y seguir las recomendaciones médicas con respecto a la ingesta y suplementación de Vitamina D.  

¿Cómo hacer que mi peque tome suficiente calcio en su dieta? 

En lactantes, la leche materna es el alimento ideal y una fuente óptima de calcio, y las fórmulas infantiles están enriquecidas con calcio, aunque la cantidad puede variar de una fórmula a otra.  

La leche materna es el alimento ideal de forma exclusiva dentro de los 6 primeros meses de vida y la fuente óptima de calcio en esta edad. Según la Asociación Española de Pediatría, estas son las cantidades de aporte de calcio recomendado por edades:  

• De 7 a 12 meses se recomiendan 200 mg al día. 

• De 1 a 3 años se recomienda una ingesta de 700 mg al día.  

• De 4 a 8 años una ingesta de 1000 mg diarios. 

• De 9 a 18 años se obtiene la máxima aposición de calcio en los huesos con ingestas de 1300 mg al día.  

Los yogures* para bebés de Hero Baby tienen un formato ideal para complementar un almuerzo o una merienda y se pueden usar como ingrediente principal junto a fruta, cereales integrales o frutos secos triturados para ofrecer una comida equilibrada. Son una manera divertida de que los peques tomen calcio con un alimento distinto a la leche.