Paso de la cuna a la cama

Hasta el año las almohadas para niños están totalmente desaconsejadas, sobre todo por el riesgo de asfixia, igual que no deben tener ningún peluche o elemento blandito cerca de su cabeza.  

De igual forma no se recomiendan los cojines antivuelco, las chichoneras ni las almohadas para la plagiocefalia.  

La cuna, moisés o camita debe de estarlo más despejada posible siempre, aunque podemos usar una sabanita de algodón transpirable, una muselina o tener ropa de cama adecuada para ellos. 

Recuerda que la postura en la que colocar a tu bebé siempre boca arriba para dormir. Ni de lado ni boca abajo, siempre boca arriba. Cuando ya tenga habilidad para darse la vuelta él o ella encontrará posturas con las que esté confortable, si se ha dado la vuelta por sí mismo o por sí misma no hace falta volver a ponerle boca arriba.  

¿Cuándo tengo que pasar a mi bebé de la cuna a la cama? 

Piensa que tu bebé puede dormir contigo en tu cama todo el tiempo que decidáis, es una cuestión personal que no comporta ningún riesgo, y una práctica muy extendida, pero si decides pasarle a su habitación es aconsejable por lo menos esperar hasta los 12 meses, y en ningún caso antes de los 6 meses. 

¿Cómo tiene que ser la cama de mi bebé cuando deje la cuna? 

Cuando decidas cambiar a tu bebé, ya pasado el año, a su cama, elige una que sea segura y espaciosa, preferiblemente que pueda subir y bajar sin ayuda, que no tenga esquinas ni saliente y que esté lejos de elementos que pueden ser peligrosos, como cables, cuerdas de persianas, ventanas o enchufes.  

Las camas Montessori que cada vez tienen un uso más extendido no solo permiten tener un colchón prácticamente al nivel del suelo, suelen tener agradables formas de cabaña o casita que les llama mucho la atención tanto para zona de descanso como para lugar de relajación o juego simbólico.  

Están adaptadas a su nivel de desarrollo y facilitan la autonomía, ya que les permite entrar y salir con total libertad.  

Si la cama es alta, deberemos asegurar que tenga una barrera de seguridad acorde a la edad de nuestro bebé.  

¿Tengo que ponerle cojines para niños en su cama? 

Hay peques que pueden no pedir una almohada hasta los tres o cuatro años, fisiológicamente, por el tamaño de su cabeza con respecto al cuerpo no la necesitan hasta que los hombros son más anchos que la cabeza, y únicamente si suelen dormir de lado, para que la postura del cuello y las cervicales sea más confortable.  

Hay que tener en cuenta que prácticamente todos los juegos de cama infantiles además vienen con funda de almohada, así que les va a hacer ilusión tenerla y les puede ayudar a que estén más motivados a dormir en su cama si tienen una almohada con dibujos divertidos o sus personajes favoritos.  

Pero de todos modos intenta mantener su cama libre de juguetes, peluches y almohadas cuanto más tiempo posible. 

¿Qué tipo de almohada compro para mi bebé? 

A partir del año puedes comprar una almohada finita, no tiene por qué tener el tamaño de las de adulto. Fíjate en que sean hipoalergénicas.  

Revisa si tienen funda incorporada, y si es así que la cremallera quede en la parte interior para que no esté accesible ni se la puedan clavar o chupar durante la noche.  

Pueden ser de poliéster, espuma viscoelástica o algodón orgánico, pero te recomendamos que se pueda lavar en la lavadora fácilmente