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¿Por qué mi bebé no duerme?

El sueño del bebé es una de las mayores preocupaciones de las familias. Pero el hecho de que tu bebé llore y tenga varios despertares durante la noche es normal. Tu bebé acabará durmiendo solo y toda la noche, es solo cuestión de tiempo.

Hay bebés más dormilones que otros, y todos son normales 

De todos modos, hay algunos consejos que podemos darte para intentar mejorar vuestro descanso, y que los despertares sean más cortos o menos frecuentes.  

Posibles causas de que tu bebé no duerma 

Ten en cuenta que todo el tiempo que el bebé ha estado en el vientre materno, no tenía horario ni patrón, puede llevar varios meses adaptarse a los horarios. El sueño es un hábito, además de una necesidad, y requerirá de cierto ritual para instaurarlo con éxito.  

Puedes revisar algunos aspectos para asegurarte que tu bebé tiene todo lo que necesita para poder descansar:  

  • Cuida el entorno: Un espacio con poco ruido, poca luz y pocas distracciones ayudará a tu bebé a conciliar el sueño por la noche.  

  • Tranquilízale y cálmale antes de acostarse: El sueño lo regulan las hormonas de melatonina y cortisol, un exceso de cortisol no dejará dormir a tu bebé. Acúnale, tranquilízale y acude a su lado si llora.  

  • La temperatura de la habitación debe rondar los 17-22 ºC, abrígale siempre con una capa de ropa más de la que usarías tú para dormir.  

  • No dejes que tenga siestas muy largas. Todo y que tu bebé necesita varias siestas durante el día, estas no deben ser excesivamente largas ni terminar muy cercanas al momento de acostarse.  

 

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Mi bebé no duerme por la noche en la cuna 

Si quieres que el bebé se acostumbre a su cuna, puedes también preparar una rutina de sueño en la que tengáis un baño tras la cena, un momento relajante de música o cuento, y un suave masaje en su cuna para que le ayude a conciliar el sueño.  

Sigue una rutina uniforme y tranquila para que tu bebé se pueda anticipar a lo que va a ocurrir. Empiézala siempre antes de que tu bebé esté demasiado cansado y llévale a la cama cuando esté somnoliento, pero todavía despierto, para que asocie la cuna con el proceso de quedarse dormido.  

Mi bebé tampoco duerme de día 

Los bebés necesitan pequeñas siestas durante el día, si no las realiza puede que esté incómodo por algún motivo como cólicos o malas digestiones. Consulta con el profesional de pediatría en las revisiones periódicas de tu bebé.  

Un exceso de estímulos, como pantallas móviles, televisión, muchas visitas o juegos a todas horas, pueden también desconcertar al bebé. Ofrécele horas de calma para que pueda conciliar el sueño durante el día.  

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¿Cómo estimular el sueño del bebé? 

Durante los primeros meses o años, es normal que tu bebé se despierte para comer. Durante estas tomas nocturnas mantén la calma, la luz tenue, y el ambiente relajado, para que tu bebé entienda que es momento de dormir.  

Dale tiempo para que se acomode y revisa que su postura sea cómoda. Es normal que tu bebé te necesite cerca, o en la misma habitación, para poderse dormir.  

Una cena ligera y nutritiva, como por ejemplo la papilla de 8 cereales o tarritos de buenas noches, cuando han empezado la alimentación complementaria, les ayudará a no sentirse molestos por problemas de digestión y conciliar el sueño sin hambre. 

¿Cuál es la mejor forma de que duerman los bebés? 

Recuerda que no es cuestión de aprendizaje ni habilidad, que tu bebé duerma toda la noche, tómate el tiempo para entender sus hábitos y su forma de comunicarse, cada bebé es único y diferente. 

Sin embargo, algunos padres optan por utilizar el colecho como una opción para conciliar el sueño de su bebé. Si optas por esta opción, hazlo de una forma segura:  

  • Asegúrate que el bebé no puede caerse ni quedarse atrapado en ningún lugar de la cama o cabecero.  

  • Sobre todo, durante los primeros meses, usa una cunita de colecho o cama sidecar con un colchón firme adaptado a la edad de tu bebé.  

  • El bebé debe dormir boca arriba, nunca boca abajo ni de lado.  

  • Evita almohadas, mantas con pelo, peluches, cojines o elementos que puedan cubrirle la cabeza.  

Al final, cada padre descubrirá su mejor truco para dormir a su peque, ya que no hay una fórmula mágica escrita que sirva para todos los casos. Cada bebé es un mundo, por lo que la mejor forma de conseguir dormirlo será conocerlo y descubrir qué cosas lo calman.