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Yogures para niños: dónde y cuándo tomarlos y otras preguntas frecuentes

El yogur para bebés es una buena opción para aquellos niños que empiezan a complementar su alimentación de leche materna con otros alimentos. Este tipo de yogures aportan proteínas de alto valor biológico y son una importante fuente de calcio, un mineral indispensable para el crecimiento del pequeño.

¿Cómo debe comer yogur tu bebé? 

Una vez que el bebé ha alcanzado la edad indicada para iniciar la alimentación complementaria, puedes darle yogures. Como aún estará iniciándose con nuevos alimentos, es conveniente que el yogur sea lo más natural posible y que esté indicado especialmente para bebés. En el caso de los yogures para bebés de Hero, están sujetos al protocolo Calidad Baby, una serie de controles de calidad que ayudan a hacer alimentos óptimos y saludables.  

Deberás tener mucho cuidado y prestar atención al etiquetado del producto para evitar que el yogur tenga azúcares libres. Para saber si un alimento contiene azúcar añadido, debemos fijarnos en la información nutricional de la etiqueta, en concreto, en la lista de ingredientes. Una vez veamos si se ha añadido o no azúcares como ingrediente, deberemos de fijarnos en la tabla nutrición, en el apartado de Hidratos de carbono, de los cuales azúcares, buscando que sea una cantidad lo menor posible.

Cuando vayas a darle el yogur, asegúrate de que se encuentra a temperatura ambiente para que la ingesta le resulte agradable, y si utilizas una cuchara con el tamaño adecuado para tu peque, ¡mucho mejor! Debes tener en cuenta que la cantidad que consuma tu peque al principio va a ser muy poquita, ya que se estará acostumbrando a los nuevos sabores y no todos los niños se adaptan al mismo tiempo, cada uno tiene su ritmo.  

¿Cuándo se recomienda tomar yogures para bebés? 

Es importante que el aporte lácteo los primeros años de vida proceda de la leche materna o de la fórmula infantil.  

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que no se introduzca leche de vaca en la alimentación hasta cumplido el primer año de vida del bebé. No obstante, sí se pueden tomar ciertos derivados de la leche de vaca como los yogures para bebés en pequeñas cantidades, siempre y cuando no sustituyan a la leche materna o a la leche de fórmula. Estos yogures deben estar elaborados con ingredientes naturales, sin aditivos ni ningún otro elemento perjudicial, sin azúcares añadidos ni edulcorantes y se recomienda que no sean desnatados. 

¿Cómo conservar los yogures? 

Por lo general, todos los yogures deben conservarse en frío para que el producto no se estropee, pero eso es así si el yogur no es pasteurizado. En el caso contrario, los yogures pueden conservarse como cualquier otro producto que no necesite frío, aunque nunca está de más mantenerlo en un lugar fresco y alejado del sol o, por lo menos, que no reciba los rayos solares de manera directa. 

La pasteurización es un proceso térmico de higienización de alimentos que se realiza con los líquidos para reducir y o eliminar la presencia de agentes patógenos sin que se alteren las cualidades y la composición del producto. 

En conclusión, la suerte de los yogures pasteurizados es que se conservan a temperatura ambiente, conservando perfectamente sus características organolépticas y de seguridad alimentaria. 

¿Dónde tomar yogures para bebés? 

Los yogures para bebé son perfectos para tomar en cualquier lugar, ya sea la playa, el parque, o mismo en casa.  

¿Cómo transportar yogures? ¿Necesito llevarlos en una nevera? 

Los yogures que no han sido pasteurizados deben mantenerse en frío. 

Los yogures para bebés pasteurizados no tienen por qué mantenerse en frío, pueden estar a temperatura ambiente, por lo que son ideales para llevarlos desde casa en los largos viajes familiares por carretera o para pasar un día en el parque o en el campo, ya que, aunque no dispongas de un modo de refrigeración como sería una nevera portátil, no habrá ningún problema con el transporte y la conservación del yogur que va a ingerir tu bebé. 

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