Cómo afecta la música al desarrollo de tu bebé: desde el embarazo a los primeros años de vida
No hay duda de que la música produce efectos beneficiosos en las personas. Nos relaja, cambia nuestro estado de ánimo, puede ayudarnos a dormir o a despertarnos con energía. Pero ¿Sabes que tiene efectos beneficiosos también en los bebés ya desde el embarazo?
¿Qué efectos produce la música mientras estás embarazada?
Se ha demostrado que la música juega un papel en el desarrollo del cerebro incluso desde antes del nacimiento. Alrededor de las 16 -18 semanas de embarazo, tu bebé ya podrá escuchar sus primeros sonidos y sobre las 24 semanas, cuando sus orejitas ya se han formado, se ha visto que los bebés en la barriga ya son capaces de girar la cabeza en respuesta a sonidos y voces.
¿Qué música es recomendable para embarazadas?
En el tercer trimestre el bebé será definitivamente capaz de escuchar la música que pongas. Música clásica, música suave como nanas o melodías que inspiren felicidad van a producir efectos relajantes, tanto en el bebé como en la madre.
Cantarle canciones que luego puedas usar para dormirle porque le ayudarán a volver al estado de calma que tenían en el vientre materno.
¿Cómo ayuda al desarrollo cerebral del bebé la música?
Desde la neurociencia se ha estudiado los efectos a largo plazo que tiene la música en el cerebro de los bebés y se ha visto que la música activa varias áreas del cerebro que le ayudarán a adquirir diversas habilidades, como las de lectoescritura, más adelante.
También se ha detectado por ejemplo que el córtex prefrontal, el área que se ocupa de procesar música y lenguaje, es mucho más activo en los bebés que escucha música regularmente.
El uso de instrumentos facilitará de igual manera otros aspectos de su desarrollo, mejorará su precisión o creatividad y su impacto es aún más poderoso que el de únicamente escuchar, ya que desarrolla la comunicación entre los dos hemisferios del cerebro, cosa que permite que los mensajes viajen a través del cerebro de forma más rápida a través de nuevas rutas.
Así que la exposición a la música desde edades tempranas, entre otros beneficios se ha demostrado que:
- Mejora el humor y ayuda a los bebés y niños a estar en contacto con sus emociones.
- Estimula la producción de químicos del cerebro tan importantes como la oxitocina o la dopamina, que ayudan a que los bebés estén más receptivos, empáticos o incluso más colaborativos a la hora de compartir juguetes.
- Potencia la concentración y el aprendizaje.
- Mejora la creatividad.
- Ayudarán a la adquisición del lenguaje y mejorarán su comunicación.
¿Cómo puede ayudar al sueño de tu bebé la música?
Puedes ayudarte de música para crear una rutina de sueño en tu bebé, le ayudará anticipar el momento de dormirse y a relacionar la música con un estado relajado. Elige un momento para poner una melodía al empezar a preparar la hora de acostarse mientras le haces el último cambio de pañal o una canción que cantar siempre a la hora de dormir.
Una música suave, relajada y repetitiva se ha demostrado que contribuye a bajar el ritmo cardíaco del bebé y proporcionar un estado calmado que permite una más profunda respiración. Si viene además cantada por una voz que reconocen les ayudará antes a llegar a ese estado de calma.
¿Cuál es el origen de las nanas?
La palabra inglesa “lullaby” viene de los sonidos “lala” o “lulu” que al igual que el español “nana” son los sonidos que usaban las madres o enfermeras para calmar a los bebés.
Hay nanas en todos los idiomas y culturas. El más reconocido y usado hoy en día es probablemente la Canción de cuna de Brahms, que se publicó por primera vez en 1868.
¿Cuáles son los mejores instrumentos para niños y niñas?
Hay muchísimas formas en la que crear música con tus peques. Además de cantar, usar palmas, pisadas o chasquidos puedes usar elementos domésticos como una batería de cocina y cucharas de madera.
Si quieres regalarles instrumentos a tus peques hay sonajeros, palos de lluvia, maracas, pequeños tambores, xilófonos, un balafón, ... Lo importante es que sean adecuados a su tamaño y puedan manipularlos y experimentar sin sonidos muy estridentes.